Sin dejar de ser un bar clásico de los años 60, contamos con una sugerente carta de raciones y con la posibilidad de degustar un buen número de platos, basados en la comida tradicional que elaboraban nuestras madres en las cocinas de chapa económicas.

O esos platos más ancestrales transmitidos de nuestros antepasados y que, todavía, rezuman sabores de agradable rancio y aromas de cocina de humo. Como ese aroma inconfundible de los embutidos de León y como no, de nuestra estrella la cecina de vaca curada en Priaranza de la Valduerna.

Una carta de vinos cuidada y variada para satisfacer a los clientes con las denominaciones de origen más representativas de España, pero dando a los vinos de León la mayor de las atenciones.

Pero si lo que te gusta es la cerveza, una corta pero selecta carta de cervezas belgas en formato de 75cl. armonizan nuestros platos.

Para finalizar, una copa de buen Brandy español o Whisky de diferentes procedencias y estilos, así como un combinado de los licores “Premium” más actuales puede ser el remate perfecto a esta propuesta gastronómica.

El servicio es personal, familiar y sencillo. Acorde a nuestras posibilidades.

Marcando nuestro estilo.